Xenoformo

 

OBRA MAESTRA DE GOTHIC METAL. LA FORMACIÓN LUSA SIGUE MUY INSPIRADA EN EL 2015.

 

Ha llegado a mis manos el nuevo disco de sin duda la mejor banda creada en la Península Ibérica. Nos referimos al grupo de Gothic/Dark/Melodic Black metal, Moonspell. Todos los amantes del metal de calidad conocemos al grupo. Quien no sepa quiénes son que lo consulte en el Wikipedia. Es una formación  que ha hecho obras maestras del género como los discos  Wolfheart, Irregilius y the Antidote (incluidos en mi libro), han realizado discos experimentales coqueteando con sonidos electrónicos como el Sin Pecado y el Butterfly Effect, pero siempre innovando y no haciendo dos discos iguales. Sus plasticos Memorial y Night Eternal, orientados hacia tesituras más extremas me parecieron trabajos notables que disfruté en si día, pero su última obra al Alpha Noir/Omega White, a pesar de  su indudable calidad y ganas me transmitió más bien poco, convirtiéndose  en uno de los discos de esta formación que no me dijo prácticamente nada. Ante su nueva obra esperaba más bien poco, pensando que sus discos buenos ya los realizaron; error por mi parte. Al darle al play, ya desde el primer segundo vi que este plástico era muy diferente a su disco anterior. La inspiración de los portugueses ha  sido grandiosa , creando un discazo que los vuelve a poner en el panorama del Gothic Metal de manera incuestionable. Esta vez el disco se ha alejado de los sonidos más agresivos, consiguiendo ser un disco oscuro, melódico, potente, pegadizo y por momentos tremendamente adictivo, con unos estribillos fabulosos y sobre todo algo que hacía tiempo que no hacían: unos punteos y solos en algunos cortes por parte de Ricardo Amorim y  Pedro Paixao de una técnica abrumadora ( los sólos que se marcan en Extinct, Doomina, Future the Past y Meduselem son deliciosos) convirtiendo a este plástico en uno de los más técnicos de la formación. En esta obra  han optado por un sonido cristalino obra de Jens Bogren y le ha quedado de lujo. Los teclados son majestuosos, las guitarras técnicas, melódicas y pesadas. El bajo tiene protagonismo en las partes más lentas y la voz gótica de Fernando Ribeiro es impresionante. Su voz raspada también la utiliza en algunos cortes para marcar la dualidad de algunos temas,  dotando de agresividad y oscuridad a algunas partes con una clase que muchos grupos ya quisieran para sí. Hay cortes pegadizos como Breathe, con la inclusión de sonidos e instrumentos turcos, con estribillos grandiosos como Extinct, bailables como Lafe of us, oscuros como Malignia o Funeral Bloom y baladas góticas que llegan al alma como Doomina o Future is dark, o con reminiscencias orientales como Medusalem. Un disco ideal para escuchar en una discoteca gótica en un ambiente oscuro, familiar y siniestro o en tu casa fijándote en cada detalle del combo luso y lo buenos e inspirados que pueden llegar a estar después de 25 años en liza.  Bravo por los portugueses. Este será el cuarto disco de la formación lusa que me embriaga y engancha. Bravo por ellos. Me han hecho disfrutar de lo lindo. Gracias Moonspell.

 

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